Me enteré que un lugarcillo, de ésos lugarcillos de la noche donde uno encuentra música, gente, alcohol y sana diversión, cerrará sus puertas para siempre. O tal vez no para siempre, tal vez las cerrará en lo que le cambian la imagen, el color de las sillas y la ubicación del lugar para fumar antes de volverlo a abrir con otro nombre que no haga referencias al infierno, al fuego o al color rojo, como antes.
Sucede que en sus inicios era el antrillo fresa de moda de mi pueblo, luego abrieron otros y perdió el glamour... bueno, tal vez nunca tuvo glamour ja... pero perdió el título del lugar de moda y ya.
Yo no soy 100% antrera, pero algo tenía de emocionante ir a ése lugar con mis amigas. Tantas veces que fuimos. Tantos miércoles, jueves, viernes y sábados con sendas jarras de boligomas (bebida extraña de la casa) generalmente patrocinadas por la banda que tocaba en vivo, ya entrada la noche, los éxitos de reik y luismi y así.
Creo que nos sentamos en todas y cada una de las mesas del lugar y aún cuando cada vez que íbamos ya sabíamos casi casi de memoria todo lo que iba a pasar; la entrada tipo 11, escoger mesa, atorar las chamarras y bolsas abajo de la mesa, trepar para sentarse en los banquitos o arranarse en los sillones, música de moda, primera ronda o primera botella, electro dance, salud, fotos, bailar, éxitos de siempre, ida al baño, banda en vivo, salud, segunda ronda, luismi, reik, boligoma para la mesa que más eche desmadre, we love you banda a la de tres gritamos como locas, va, ahhhhh, no pues gana la mesa de allá, salud, más música de moda, más bailoteo, más baño, última ronda, hora del reggaetón y la bailada cagada, todos estamos pedos, vamos por tacos, oh si... bueno decía, aún cuando ya sabíamos que esto sucedería, cada vez que fui a ése lugar, cada una de las veces, hasta cuando me robaron mi cámara, me la pasé increíble.
No debería estar escribiendo un chaqui post acerca de un chaqui lugar de chaqui música que ni siquiera es de mis cosas favoritas para hacer en la vida. Pero ¿quién me va a negar que las noches de exceso de amigos, exceso de chupes y exceso de baile son de las cosas más chingonas que hay en este mundo?
Ok lo puede negar alguien a quien no le guste bailar. Ya.
Hace 1 semana