lunes, 22 de junio de 2009

El 21 de junio del 2008

Bueno pues este post iba a estar medio emo por hoy (bueno hace tres horas se acabó el hoy...) cumplirse un año de mi regreso a tierras aztecas pero pasaron varias cosas que me alegraron bastante y me sacaron de un mood medio raro que amenazaba con invadirme.

Amenazaba con invadirme porque mi mamá se pone de nervios con la situación familiar actual y se desquita conmigo y las diarias salidas con la prima y los amigos. La entiendo.
Amenzaba con invadirme porque alguien importante hizo algo feo. De éso cuando esperas algo de alguien o más bien esperas que alguien no haga equis cosas feas y las hacen. Lo superamos.
Amenzaba con invadirme porque... ajá si, esto no lo pondré. Lo superé.
Amenazaba con invadirme porque, pues si, regresé hace un año y han pasado mil cosas, he crecido de mil maneras, he llorado más que nunca antes, he aprendido a aceptar llorar, me gradué, bajé 10 kilos, me juzgó (y no explicaré lo que intento decir con juzgar en este caso...) la persona que más que querido y yo le creí para después entenderlo todo, aprendí mucho, se me rompió el corazón como ocho veces y se regeneró, seguí con mi propósito de viajar mucho, conocí gente, me conocí más a mi misma... y puedo enumerar toda esta lista sonriendo. Lo estoy disfrutando. Todavía.


Pero hoy fue el festejo del día del padre. Mi papá está en mi pueblo y festejó con sus amigos. Ése fue el único detalle.
Acá comimos ocho litros de helado norteño siiii ñor, platicamos de cuando mi abuela era una señora modelo de los años cincuentas y de cómo iban de compras a Estados Unidos en su Chevrolet blanco '53. De cómo mi abuelo se compraba sombreros y mi abuela les compraba ropa a mi mamá y a mis tías y pedían que les llevaran sus bolsitas de compras a su cuarto del Gateway Hotel. Mi abuela se pone contenta cuando platica de ésas cosas. Ella tan fresa y tanto gusto que nos da a todos. Desde el derrame que le dio ha estado medio cañona la cosa.

Luego comimos pastel y recordamos las películas de rollo, de ésas que se proyectan en la pared. Luego superé algo pequeño pero significativo. Lo que no quise escribir allá más arribita.
Luego terminé twilight; que de por sí no leí por gusto sino porque me lo regaló Luis por mi graduación. Me gustó, es igual a la película. Ja. Creo que los vampiros están subvaluados.

Luego me comí unas palomitas con salsa valentina y mandé un mensaje que me contestaron de una manera muy muy muy chida. Y éso que ya no espero nada.

Luego decidí que mañana voy a volver a leer La tabla de flandes mi segundo libro favorito ever... Así que mi día se convirtió en uno de ésos días a pedir de boca y no me queda más que poner a ése mood que-amenazaba-con-invadirme de lado y guardado en un cajón y ver qué chingona es y ha sido mi vida el último año. Desde que me bajé de ése avión y me subí a la segunda montaña rusa emocional que ya llegó a su final. Osea este año. Y también lo chingón que fue el año francés... Y si, también todos los predecesores...

Y luego venir a presumirlo a mi blog. Y poner esta canción. Y luego poner este link. Y seguir siendo feliz.
=]

3 comentarios:

Xenomorph dijo...

Pues no me gusta que hayas tenido un recuerdo que te hizo sentir rara porque entonces yo no pude estar ahí contigo para acompañarte (como siempre lo haré), pero que bueno que lo superaste.

La verdad es que de repente sí entra la nostalgia de cuando estuviste un tiempo (en tu caso, mucho tiempo) en un lugar que te fascinó y quisieras vivirlo de nuevo... sin embargo sabes que la vida te tiene preparadas otras cosas, momentos que son importantes... ¿te digo uno? ¿te imaginas como estaríamos tu y yo si te hubieses quedado en las Francias? Ciertamente no sería lo mismo.

Te amo amiga, regresa pronto =]

Milky dijo...

qué pasó!!
qué tienes!!
carajooo, necesito saberlo ya!
te amo =]

Ninja Peruano dijo...

Y no te hacen felices las nuevas fotos de Alicia en el país de las maravillas con Jhonny Depp?